Argentina debate ley de aporte extraordinario sobre grandes fortunas

El proyecto del llamado "impuesto a los millonarios", que la oposición rechaza por "confiscatorio", cuenta en principio con los votos necesarios para obtener su aprobación en la Cámara Baja y deberá luego ser debatida en el Senado

La Cámara de Diputados de Argentina se apresta a dar su apoyo la madrugada del miércoles a una iniciativa del gobierno peronista de centroizquierda de Alberto Fernández para un aporte extraordinario sobre grandes fortunas, por el que espera recaudar unos 3.000 millones de dólares.

El proyecto del llamado «impuesto a los millonarios», que la oposición rechaza por «confiscatorio», cuenta en principio con los votos necesarios para obtener su aprobación en la Cámara Baja y deberá luego ser debatida en el Senado, varios meses después de haber sido presentado en el Congreso.

«Tanto es el nivel de concentración de riqueza en pocas manos que este aporte recae sobre menos del 0,02% de la población. Cerca de la mitad de lo que se recaude será aportado por sólo 252 personas, las que están en la cima de la pirámide», dijo en el recinto la diputada oficialista Fernanda Vallejos.

La contribución, por única vez, gravará a aquellas personas cuyo patrimonio declarado supere los 200 millones de pesos (2,35 millones de dólares) con una tasa progresiva de hasta 3,5% para los bienes en Argentina y de hasta 5,25% sobre los bienes fuera del país.

Se estima que el aporte alcanzará a entre 9.000 y 12.000 personas en un país con 40,9% de sus 44 millones de habitantes en la pobreza y un desempleo superior al 10% que aún debe remontar una recesión que arrastra desde 2018 en medio de una crisis económica agravada por la pandemia.

El gobierno espera que el aporte a las grandes fortunas ayude a fortalecer el frente fiscal tras ocho meses en los que el Estado destinó millonarias ayudas al sector privado para paliar los efectos económicos de las restricciones impuestas para combatir el avance del coronavirus, que en el país ha dejado desde marzo más de 35.000 muertes y 1,3 millón de contagios.

Militantes del peronismo realizaron caravanas de vehículos y marchas a pie, respetando la distancia, todo el día por el centro de Buenos Aires y en torno al Congreso en apoyo al proyecto.

Apoyos y rechazos
La oposición liberal de Juntos por el Cambio rechaza la iniciativa por considerarla «confiscatoria», en tanto sectores de izquierda anticiparon su abstención.

«Argentina ya tiene muchos impuestos y una altísima evasión, en vez de crear nuevos impuestos lo que se debe hacer es eficiente el cobro de los que existen», argumentó el diputado de Juntos por el Cambio Álvaro González.

Sin embargo, el oficialismo cuenta con los votos necesarios para asegurarse su aprobación en Diputados, en tanto dependerá de aliados para que su paso por el Senado lo convierta en ley.

«La oposición busca argumentos que van a contramano del objetivo que tiene este proyecto y dicen que es un impuesto pero es un aporte extraordinario y por única vez por la pandemia», afirmó el diputado peronista José Luis Ramón, aliado al gobierno.

El sector empresario también está dividido frente a la ley. Cámaras de grandes empresas rechazan la iniciativa mientras ha recibido el apoyo de las que nuclean a las pequeñas y medianas.

«La iniciativa terminará descapitalizando a empresas que invierten, producen y sostienen el empleo en un contaxto de emergencia sanitaria», se quejó la poderosa Unión Industrial Argentina, aunque el aporte es para las grandes fortunas y no se impone a las compañías.

Qué dice el proyecto 
El proyecto establece que el aporte será por una única vez.

También declara fines específicos para el dinero recaudado, como programas de desarrollo y producción de la pequeña y mediana empresa, proyectos de educación y becas estudiantiles y compra de equipamiento médico.

Establece que el 20% de lo que se recaude se destinará a insumos médicos para atender la emergencia sanitaria por la pandemia, otros 20% para pymes, 15% a programas para desarrollos sociales, 20% para becas estudiantiles y 25% a programas de desarrollo de gas natural.

La ley prevé mayores alícuotas para los bienes radicados en el exterior, pero posibilitará un alivio para aquellos que decidan repatriarlos en todo o en parte.

La economía argentina está en recesión desde 2018 y según estimaciones del Fondo Monetario Internacional finalizará este año con una caída superior al 11%.